sábado, 2 de octubre de 2021

Acerca de la imagen

 

 


                                       Acerca  de la imagen


¿Sobre  qué significa el equilibrio?  El equilibrio porque a pesar de habitar en un mundo de muerte , el equilibrio y la armonía  son principios, son fuentes  primigenias por los cuales la vida permanece , y esto incluso más allá de toda destrucción … La muerte y la vida  se fundamentan  o tienen su fundamento  solo o  atraves  de la permanencia  del  orden universal  por lo cual las cosas fueron creadas  e incluso toda transformación, todo cambio solo puede darse a partir  de un orden universal establecido  que debe de estar basado en la ley de la armonía   y el equilibrio entre otras cosas ; como parte  de eso que puede llegar a descubrirse como la perfección, la unidad, el uno .

 Leer el Fedro.  A partir de las cigarras  y de las musas  y del libro séptimo de la república, mirar la diferencia  entere oratoria  y dialéctica    y retórica  y en cuál de las tres se logra desarrollar más  el arte socrático.

Beatriz Elena Morales Estrada 



"El eterno retorno de Nietzsche  no  es una consagración  del regreso del pasado  sino una subversión del presente; no es una reiteración de lo que ha sido, sino un descubrirnos  el abismo que es nuestro fundamento"  Octavio paz.

jueves, 30 de septiembre de 2021

Brevedades




Brevedades:

Notas:

 La brutalidad e insensibilidad en nuestras  acciones,  nos hacen perder el plano de lo divino humano.  ¿Por qué?

 

Según las dimensiones  íntimas de cada uno de nosotros; hay direcciones del alma,  en que esta, pierde su conexión  al cielo; digamos,  que hay, determinados procesos corporales, que hacen  que ella,   pierda su alas.  La conciencia,  al ser  la expresión de ese,  sino  experimental; va estableciendo lo selectivo, de un modo silencioso,   que casi el individuo no lo capta o percibe instantáneamente.

De allí surge,  eso que llamamos singularidad y del cual,  algunos piensan,  que tiene también,  un origen bilógico; al igual que la tolerancia, lo cual  es  muy respetable.

 Según el tipo de experiencias erróneas o no, que vivenciemos  nos vamos alejando o acercando a una realidad reñida,  con el escepticismo  de algunos,  que solo ven,  lo que de plano,  se les presenta ante los ojos y nada más.

  O bien,  ven tan solo lo que les conviene.

Esa realidad,  que es la  que nos conecta con la divinidad y que es precisamente la condición que nos va adecuando a descubrir nuestra verdadera esencia,  llevándonos a ese nivel superior; que es,  lo que nos separa,  de la conducta bestial  e instintiva de la naturaleza cruel  e  inhumana.

 Y no solo el ser humano capta,  esa realidad por medio de la razón; sino también del corazón que le sirve de a temporizador, por decirlo de alguna manera;  para filtrar  por medio de la conciencia,  aquello que no es  humanamente “correcto” ; me refiero a las conductas monstruosas, insensibles, que tenemos con nuestros congéneres y con los otros seres vivos y como hablamos supuestamente aquí , en este escrito de seres, de personas psíquicamente   “sanas”; creemos  que la elevación  de la conciencia,  nos podría llevar a dar  un salto cualitativo,  y hasta cuantitativo,  en la escala de la evolución espiritual ; es decir para  reconocernos, sabernos,  como hijos  de Dios. Y de saber entender,  que en el contexto del padre creador;  el padre no es un mito; sino una realidad,  que nos  hace semejantes  al ser, de los seres.

Pero es una semejanza, que nos tenemos que ganar  y ganar,  con nuestras acciones, que ennoblezcan  nuestra, también, condición  de  seres humanos,  verdaderamente humanos.   ¡Oh por Dios! Valga la redundancia. 

 Sin embargo habría que ahondar más en este asunto.

Beatriz Elena Morales Estrada© Copyright

 

 

 

viernes, 10 de septiembre de 2021

Brevedades La rosa, la forma y la esencia



Brevedades

La rosa, la forma y la esencia 

 

Y si amas la rosa,  tus ojos,  se dejan caer sobre de  ella con ternura

Y si amas la rosa,  acaricias sus pétalos con ahínco, con fervor.  

Y la contemplas con tu mirada, como temiendo dañarla, hasta con el roce de tus dedos

La miras y para  ti,  es un prodigio sin comprender.

Y con suavidad tenue, tu mano se desliza y sientes,  el punzón de algo que rompe tus carnes. 

Y entonces  sueltas  la rosa con brusquedad,  asustado y herido y te concentras,  en la  gota de sangre que sale  de tu dedo.

Es decir,  solo piensas en ti, en tu afición, en tu ego.

Horrorizado   te miras  y  no te has dado cuenta, que has lanzado a la  rosa al suelo,  en donde luce ajada,  golpeada   y abandonada…

Tú, que temías hacerle daño ¿Acaso iluso no te has dado cuenta, que ya se lo has hecho, al lanzarla lejos de ti?

Porque si amas a la rosa, debes  aprender a amar   también sus espinas, son tan pequeñas…

¿Qué es una gotita  de sangre en tu dedo  comparado con  la belleza  de la rosa?

Es porque piensas,  que la perfección de la rosa esta,  es   en su forma,

pero la belleza de la rosa,  no solo está en su forma, sino también en su   esencia , en sus pétalos; en ello radica su perfección…

¿Iluso,  no te has detenido  a pensar que sin las espinas,  la rosa,  no es menos  perfecta?

Las espinas,  son parte de la perfecta armonía de la rosa…

La protege. 

He ahí, el secreto encanto de las cosas.

De manera tal,  que la rosa, en apariencia,  es solo la representación  de la forma, y la forma lo es, de lo multiforme.

 La forma misma, es lo frágil y más allá de lo visto o lo que representa, está  la esencia y la esencia es  Dios.

 Y que así como la imagen, que tus ojos contemplan,  es solo una  representación  del pensamiento;  así la rosa,  es solo,   la representación efímera de aquello,  que realmente es…

Pero un ser prosaico,  jamás se detendrá a pensar en estas cosas,  solo querrá desflorar  la rosa o destruirla  y ya.

Y quizá,  un ser culto ¿Pero qué tan culto? Mejor sería decir;  un ser sensible,  tierno,  se detenga a pensar en ello… Solo,  tal vez. 

Ni un poema   y menos  una prosa, definen lo que es perfecto, pero sí, es,   al menos,  un roce, una caricia,  que acerca la ternura…

Y que lleva a sentir la grande presencia y sí,  eso  es una rosa

 ¿Qué pues podrimos decir de ti humano cuya semejanza,  debería acercase a la de Él en tu hacer, en tus acciones? Pero lo niegas en su totalidad.  

Lleva la rosa en tu corazón,  te ayudara a encontrar tu verdadera esencia; pero  recuerda, que  no es la rosa, que  tan solo  es una forma,  de las formas,   y hay tantas formas, tantas, comenzando por ti y así,  en el otro, en los otros,  aprenderás a ver, esa magnífica presencia, que no se basa en lo aparente, o en lo intrascendente del momento;  sino  en  hallar   lo que realmente Es.

¡Quita tu ceguera y ve más! Mira más  allá de tu nariz.   

 

Beatriz Elena Morales© Estrada

 

 


domingo, 13 de junio de 2021

Brevedades: "Ensayo"



Brevedades:

Notas:

 La brutalidad e insensibilidad en nuestras  acciones,  nos hacen perder el plano de lo divino humano.  ¿Por qué?

Según las dimensiones  íntimas de cada uno de nosotros; hay direcciones del alma,  en que esta, pierde su conexión  al cielo; digamos,  que hay, determinados procesos corporales, que hacen  que ella,   pierda su alas.  La conciencia,  al ser  la expresión de ese,  sino  experimental; va estableciendo lo selectivo, de un modo silencioso,   que casi el individuo no lo capta o percibe instantáneamente.

De allí surge,  eso que llamamos singularidad y del cual,  algunos piensan,  que tiene también,  un origen bilógico; al igual que la tolerancia, lo cual  es  muy respetable.

 Según el tipo de experiencias erróneas o no, que vivenciemos  nos vamos alejando o acercando a una realidad reñida,  con el escepticismo  de algunos,  que solo ven,  lo que de plano,  se les presenta ante los ojos y nada más.

  O bien,  ven tan solo lo que les conviene.

Esa realidad,  que es la  que nos conecta con la divinidad y que es precisamente la condición que nos va adecuando a descubrir nuestra verdadera esencia,  llevándonos a ese nivel superior; que es,  lo que nos separa,  de la conducta bestial  e instintiva de la naturaleza cruel  e  inhumana.

 Y no solo el ser humano capta,  esa realidad por medio de la razón; sino también del corazón que le sirve de a temporizador, por decirlo de alguna manera;  para filtrar  por medio de la conciencia,  aquello que no es  humanamente “correcto” ; me refiero a las conductas monstruosas, insensibles, que tenemos con nuestros congéneres y con los otros seres vivos y como hablamos supuestamente aquí , en este escrito de seres, de personas psíquicamente   “sanas”; creemos  que la elevación  de la conciencia,  nos podría llevar a dar  un salto cualitativo,  y hasta cuantitativo,  en la escala de la evolución espiritual ; es decir para  reconocernos, sabernos,  como hijos  de Dios. Y de saber entender,  que en el contexto del padre creador;  el padre no es un mito; sino una realidad,  que nos  hace semejantes  al ser, de los seres.

Pero es una semejanza, que nos tenemos que ganar  y ganar,  con nuestras acciones, que ennoblezcan  nuestra, también, condición  de  seres humanos,  verdaderamente humanos.   ¡Oh por Dios! Valga la redundancia. 

 Sin embargo habría que ahondar más en este asunto.

Beatriz Elena Morales Estrada© Copyright

sábado, 29 de mayo de 2021

La odisea, una obra de literatura bellísima



La odisea, una obra de literatura bellísima

Rapsodia Primera

El primer concilio de los dioses

(Brevedades)

La historia a la que nos vamos a referir ahora, es la del divino Odiseo, quien sobresalía entre todos los hombres por su astucia y su gran habilidad para idear ardides.

Háblame musa: Empieza Homero para referirse a la diosa de la inspiración, atraves de lo cual comienza a relatar todas las grandes peripecias que este gran varón tuvo que enfrentar de regreso a Ítaca, su patria querida a la cual , no pudo retornar hasta después de mucho tiempo ; habiendo perdido a todos sus compañeros , a quienes deseaba restituir a su patria; pero que debido a la insensatez de estos, que se comieron las vacas del sol y ya estaban advertidos ; el cual enfurecido , no les permitió que les llegara el día del regreso. ¡Oh Si! Tantas penalidades tuvo que pasar el divinal Odiseo, que ni aún después de retornar a su casa, le era menester que se le menguaran por la voluntad de los dioses.

Tenía Odiseo un hermoso hijo varón, nacido del mutuo amor con su esposa; semejante a los dioses por su gran porte y belleza y a quien él había dejado, siendo muy pequeño, junto con su hermosa mujer Penélope, quien siempre le había esperado, siendo fiel a la promesa de amarse siempre. Ambos atravesaban una muy difícil situación; a su regreso, encontraría una serie de problemas, de penalidades a causa de unos jóvenes pretendientes, varones insensatos , oprobiosos y malvados, desagradables a más no poder ;aún para los ojos de los dioses alados y sempiternos; eran hombres supremamente ambiciosos, que no teniendo ningún otro pretexto, que el de pretender a la divina Penélope, la fiel esposa de Odiseo ; para devorar como gallinazos los bienes y la fortuna de este y así poder gobernar en Ítaca ; festejaban y hacían y deshacían ; derrochando cada día en convites; devorando su comida en banquetas y fiestas inicuas; tirando por la borda lo que no les pertenecía ; sin que Telémaco , ni Penélope , ni los buenos criados, pudieran hacer nada ; y que tenían que miran con tanta impotencia semejantes desmanes, todos ellos añoraban el retorno de su señor ; para así poder hacer algo , para impedirles a estos bastardos, abusadores de la gran nada , que siguieran en su injustas acciones.

Pero entonces sucedió que hubo un grande concilio entre los dioses; los cuales por decisión de Zeus; gran rey de hombres y de inmortales; (esto según la mitología griega) planearon el regreso de este por fin a Ítaca.

Entre los dioses, sobresalía la diosa Palas Atenea, gran amante de la guerra, una heroína incondicional y quien le hizo bastante propicio, el camino a Odiseo, librándole de muchos peligros, ya probándolo aquí, ora allá; no dejo de asistirle y sobre todo cuando este estuvo en Ítaca y hasta le infundió un grande enojo en contra de los tales pretendientes, incitándole a urdir un plan para acabar con ellos; pues le excedían en bastante número; entonces ella se las ideó para transformarse en peregrino, visitando al hijo de Odiseo e infundiéndole muchísimo valor, para que fuera en busca de su padre y así este, cobrara mucho aprecio entre los hombres.

A grandes rasgos, quizá de manera muy precaria, doy un breve resumen de la rapsodia primera.

Nos deleita Homero atraves de las diferentes partes de este genial libro por la habilidad en la forma de esta escritura; nos va adentrando en este género Épico con tantísima gracia en los relatos; que tal parece, que de una una u otra manera; el lector se entra a vivir de lleno, junto con el divino Odiseo todas su desventuras; es tal la gracia de este escritor, que resalta la autenticidad con la que nos describe los grandes festines y banquetes que se ofrecían a los dioses; que nos parece estar allí mismo saboreando estos deliciosos agasajos y paisajes.

Hay grandes cualidades que no les sobraban a los griegos; no solo la habilidad para la guerra, sino también, entre otras cosas, ese espíritu hospitalario que tenían; que desarrollaron para con los peregrinos, para con los huéspedes de cualquier tipo, a quienes acogían generosamente, sin olvidar que los griegos fueron grandes atletas, tenían un gusto por el atletismo y tantas otras cosas; fueron cultivadores de la belleza y del desarrollo del cuerpo.

Fue Homero junto con Hesíodo los que primeramente le dieron cabida al mito, enmarcándolo dentro de la realidad misma, para buscar en este, el origen de la verdad; el ponto, el océano, en fin, a ellos se les debe la tradición del mito.

No olvidemos tampoco a los Eodos, grandes cantores del género Épico que endulzaban con sus cantos las desventuras o alegrías de los griegos.

La Odisea esa maravillosa obra literaria; de carácter Épico, que nos es grata, que nos es digna de saborearla y vivenciarla paso a paso, en cada uno de los episodios; no olvidemos que aún ahora los hombres, las mujeres, la humanidad tienen que atravesar grandes peripecias y los griegos nos dejaron grandes enseñanzas de las que podríamos sacar provecho, en el sentido más loable posible; aunque ahora ya el mito, no tenga tanto valor como tal y nosotros busquemos o nos identifiquemos con otras maneras de pensar; el mito en su tiempo tuvo un grande valor. La odisea es una obra tal, que merece que se le guarde en un lugar importante, tal es la forma en que esta nos recrea y no solo eso, esto nos debería llevar a reflexiones mayores; dando cabida a mejores Elubricaciones, en donde prime la honestidad, el respeto, ciertos valores. En fin.

Beatriz Elena Morales Elena © Copyright



miércoles, 26 de mayo de 2021

“Breve ensayo” ¿El sufrimiento moral y el dolor son exclusivos del humano?




 Breve ensayo 

 (Acerca de los animales; más concretamente el mono  o simio)

Muchos alzan su voz y dicen;  los animales son los animales; hay que dejarlos de lado;   de ellos nos separa el lenguaje, etcétera, etcétera;  pero  es necesario revaluar nuestro comportamiento, el que nos separa muchas  veces de estos;  ese que nos hace bestiales, incluso más que ellos. Es en esa instancia   que me pregunto:

¿Hasta dónde es buena la  intervención del hombre,  en la naturaleza, sobre todo dentro de  las hordas de simios salvajes o no, los monos,  de los cuales la evolución nos muestras que son nuestros primos hermanos?

  La intervención humana es buena   y más que eso,  necesaria; siempre y cuando sea para ayudar, para enaltecer al ser del otro ¿Cómo así al ser del otro, estamos hablando de animales?  ¿Y acaso nosotros no lo  somos? Si.  Estos seres tan inteligentes  también son sujetos del ser  y del hacer.

 Pero  muchísimas  gentes se están valiendo  de su dolor, de su sufrimiento, que no es ningún drama  fútil, para llenar sus bolsillos. Son como buitres al acecho,  del  sufrimiento de estos pobres animales,  para enriquecer sus arcas. Es decir los explotan. Es más. Muchos disfrutan torturándolos.

Cuando el ser,  que se dice humano, me refiero en general a la humanidad;  actúa en contra de la dignidad de otro ser humano y de  estos,   para obtener ganancias y dinero; está cometiendo uno de los peores crímenes hasta ahora conocidos  ¡Claro eso no es nada nuevo!

¿Entonces?

Entonces según estas cosas que  se suceden;  tendríamos que  re- pensar el concepto  de sufrimiento moral,  también en los animales; pero es que,  al igual que el animal hombre,  el animal  no hombre; también tiene un cuerpo y sufre; tiene un cuerpo que lo hace sufrir obviamente y no  solo es,  por lo básico, la comida, que ya es bastante, el hambre no da tregua;  también la enfermedad.

 ¿Pero tienen conciencia los animales o es solo un privilegio del hombre?

Pero lo moral (El sufrimiento)  aquí  apunta   a un sentimiento de  desamparo , de  falta de cobijo; es decir de ayuda  y no solo primaria,  sino también en otros sentidos; pero se deshace , ese querer  ser amparado  y amparar ;  cuando  se experimentan  sentimientos  de soledad, de abandono, de  impotencia; esas mismas cosas, que estos seres también  vivencian, y  dentro de ese medio hostil,  en donde habitan.  Esto en sentido general,  como hordas de tribus y también  como criaturas, sintientes e individuales.

¡He ahí!   El punto de encaje, de engranaje dentro de esa escala evolutiva, y que algunos que se dicen ser humanos,  patean, destruyen descendiendo   así,   en la escala primordial.  ¿Cuál es el punto de encaje?

  La pandemia afecto de un modo u otro no solo al ser,  que se dice humano; a la persona que se vio a si  misma vulnerada, frágil;  sino también a la naturaleza animal, a todos en general,  pero más que todos los otros animales; al mono; simios.  Porque seres que se dicen humanos se aprovechan de ellos, entre otras muchas cosas. Y los pocos que ayudan,  ya quizá no lo hacen, por motivo de la pandemia.  ¿Digo no? 

Con esto,  deberíamos plantearnos  entonces,  que el sufrimiento y el dolor; no son algo exclusivo del ser,  que se dice humano, del hombre; por supuesto que estas criaturas,   no  poseen una estructura compleja del manejo del lenguaje,  en sentido  conceptual. 

Lo que   no podríamos afirmar  tampoco,   es que  este   animal   sea un ser del pensar.

  (Pero tampoco algunos  que se dicen humanos lo han desarrollado o cultivado)  aunque mal que bien, el humano, si  podría llegar a ser un  ser del pensar.  De hecho lo es, aunque demuestre a veces lo contrario.  

Pero es obvio,  que   todos los seres  vivos,  sufren y experimentan dolor, dado que tantos unos como otros,  estamos expuestos a muchas cosas,  que tenemos  en común. Ellos y nosotros, estamos metidos en el hábitat,   de un planeta y de una naturaleza,  en extinción.  

De manera  que esto,  hay que re- evaluarlo  y hay que colocarlo  dentro de un concepto,  que eleva también al animal  a ser,  un sujeto del dolor  y del  sufrimiento y  también del goce o del deseo;  si se puede decir así. ¿Pero por qué  hablar del animal y meterlo  en  esto?

 Porque hay algo que el ser,  que se dice humano, no debería  perder  y es esa  conexión primaria, que tiene  con la naturaleza animal.

  La conciencia de ser  y del  ser, del hacer,  en sentido universal.  ¿Eso quiere decir que los animales tienen conciencia? Todos los animales la tienen,  así sea,  de un modo primario, pero la tienen.

Además del instinto claro. ¿Entonces en que radica esa conexión?  Radica  en saber que ellos y nosotros,  somos parte  de un orden, de un  gran conglomerado  de cosas,  que mantiene la armonía de un  orden natural y manifiesto. ¡Claro que  también se encuentra  el caos!  Pero ese caos,  tiene   un orden.  

 Y  dado que  también,  la conexión psíquica,  no es solo,  un privilegio del hombre; que se dice hombre; en el más alto sentido de especie como tal.

 Allí  en esa  conexión,  encontraría aquello,  que lo hace alguien humanamente posible. Es decir, que  lo hace descubrirse   a sí mismo,  como un ser de la vida y para la vida.    Más no para la muerte.                                       

EL sufrimiento,  el dolor,  sea cual  fuere la causa; NO ES ALGO EXCLUSIVO  DE LA HUMANIDAD  COMO TAL. Ahora,  la angustia  si pareciera ser,   exclusiva del Humano que sufre o que se angustia y además,   que capta esa angustia; es decir,  esa nada y que  se ve a sí mismo como un ser de angustia o para la angustia.  En esa mera captación,  está implícita la conciencia del ser y del no ser.

  Pero en todo caso,  es imposible  no ver también  el sufrimiento del animal, del  mono, del simio…

Todos los animales sufren. Todo lo que vive y respira  sufre. 

 Notita: Aunque esta nota,   aquí no sea necesaria la publico.

 Si bien aquí,  no se maneja un lenguaje genérico, de  género;  hombre, mujer,  es porque se considera   innecesario;  dado  que   lo genérico,  queda  adherido  a lo general, donde no hay límites de género. No siempre y según la particularidad del texto  o del lenguaje empleado, es necesario,  hacer uso de lo genérico.

 Para  la muestra un botón: dada la universalidad del lenguaje.

Beatriz Elena Morales Estrada  © Copyright

 


                                               

Caos en el rostro de las cosas

 





                  Caos  en el rostro de las cosas

 

El pueblo tiene derecho a reclamar que no se le  quite lo que por derecho  propio es suyo, tiene Derecho a  solicitar que no sean vulnerados sus derechos; pero aquí,  es donde entran las fuerzas violentas y represoras y los interese  corruptos  de un lado y de otro; que son capaz de cualquier cosa.  

Pero Independientemente de los fines políticos de unos y de otros; y de lo que está sucediendo,  tras décadas de explotación;  de hambre y más;    he de decirlo de nuevo, que la oscuridad  se halla,   anda desatada; esto es un pandemonio, pero un verdadero pandemonio;   tan lleno de crueldad , de los unos para con los otros.  Actúan los unos contra los otros con crueldad  e  impiedad, valgan las redundancias.

 ¿Cómo es posible que tengan esas conductas tan aberrantes?

Violaciones a mujeres patrulleras, e indefensas,  de un montón  de hombres,   quemar con gasolina a  un pobre patrullero etcétera, etcétera; atacar sin  ninguna piedad  a personas,  a las   ambulancia a los médicos, que van es a ayudar tanto a unos como a otros, que salvan vidas.

El tema de los desaparecidos   por la extrema derecha y la vulnerabilidad de sus derechos  y más mucho más, mucho más, no puede dejarse pasar por alto. 

La impiedad, la crueldad,  están  desatadas,  y  son ahora  las  protagonistas.  

No es una guerra  limpia.  Lo inhumano parece reinar.  Parece ser  que los demonios andan  sueltos.   Reina   la impunidad, la injusticia.

 La pandemia ha pasado a un último lugar.

 Las fuerzas del poder y de los que buscan el poder,  deberán llegar a un acuerdo. A un verdadero acuerdo sin traicionar lo acordado y se requiere que sea pronto.

   Pero tal parece que a nadie de ellos le interesa, como debería interesarles en verdad. Nada se gana con torturar  y matar.

Tanto de extremas de derecha,  como de extrema   izquierda; no hay justificación para actuar así. Para estas bestiales a actuaciones. ¿Acaso los mueve También  tanatos?

 En todo esto,  Sigue rigiendo el pandemonio Total, Satán se está apoderando del mundo. De Colombia  Y esas bestiales y crueles formas de hacer,  solo dan cuenta de una vieja Sodoma.

 En verdad LES DIGO;  AQUÍ NO HAY NUNGUNA GALLARDIA. Están jugando demasiado sucio, las aguas están muy pantanosas. 

Todo mundo dice hurra por los jóvenes y por  las mujeres  ¡Hurra! Que así sea, que  sean protagonistas, de este momento histórico,  pero no se olviden,  que la Violencia no lleva a ninguna parte.  Lleva  es al poder  a unos líderes,  que solo quieren reinar y no para bien,  de un pueblo,  sino  de ellos y  de sus circulillos. Los que van a reinar  son otros. Los más lisos y astutos.   

¿Quién pone los muertos?

A lo largo de la historia humana; hemos visto que siempre, siempre el pueblo es el que pone los muertos y en el poder se quedan siempre los líderes  que incitan a las masas  a una  revolución; bien sean  movimientos de izquierda extrema, suave, disfrazada o  no; bien sea extrema derecha, disfrazad o no. Siempre los que  se ponen  en el poder,  no ponen los muertos, No.  Y todas esas fuerzas,  que trabajan para los gobiernos,  son puros hijos del pueblo; ahora,  otra cosa,  es que tengan una mente arribista.

Bien,  enfoquemos por   unos segundos ,  la mirada en los que pintan una  izquierda moderada, un socialismo al estilo  Maduro y otros;  los ejemplos en el mundo  y en Latinoamérica han mostrado,  que estos modelos de gobierno solo  sitúan a tiranías en el poder,  que nunca van a hacer nada a favor  del pueblo, ni ahora ni  nunca ¿Por qué? Porque solo les interesa el  poder y todo lo que este les proporciona.

 Lo demás es sometimiento.

 Por ejemplo en china,   se habla de un gobierno comunista y lo que vemos es tiranía,  y tiranías disfrazadas o  no; cada  vez más,  intentando ser modelos de gobierno, camufladas.  Pero en todo caso ¿Quién pone los muertos?

El pueblo, el pueblo señores y señoras;  los que tienen la sangre ardiente, esos, esos mismos.

En la  tierra,  una sociedad  justa equitativa sería lo ideal…  Una verdadera democracia consolida con todo y   con todos.  En fin… 

  Pero ya vendrá uno que si reinara con verdadera justicia. Y equidad.

 

Beatriz Elena Morales Elena © Copyright

domingo, 23 de mayo de 2021

Brevedades Hermes



(Capsulitas)

  Brevedades

Hermes:

Mensajero “celestial”  que alude a un infante  de la descendencia de los “dioses”  Que suele dejar sus huellas sobre montoncitos de piedra;  piedras como caminos, como una forma de mostrar un camino,   Esto tiene que ver con el conocimiento.  Es manifiesto en esto,  la psique humana. La palabra dioses está referida a esas fuerzas psíquicas, que tienen que ver con el pensamiento o conocimiento del Logos. El logos está relacionado con el pensar humano.  De hecho todo occidente a “heredado”  en cierta forma,  esa forma de pensar, que viene desde los griegos. Se dice entonces que Hermes es el mensajero de esa  psique,   que se manifiesta de cierta manera,  una es por medio de Hermes…

Y nos lleva por el conocimiento,  bien sea racional, o  conceptual.

¿Pero hay un Logos acaso que se “opone”  al logos humano? 

Dejemos esta pregunta enjabonada, para que la prenda se vaya descurtiendo un poco”

 

Beatriz Elena Morales Elena © Copyright

 


sábado, 8 de mayo de 2021

En cuanta a la estética

 



En cuanta a la estética

Un escritor, un verdadero escritor no debe buscar solo nombrar aquello que es bello y que de algún modo u otro solo estaría nombrando, mostrando lo externo, la parte superficial y no el fondo de las cosas…

 Tú dices es un escrito muy bello, quizá no lo sea;  no en cuanto no está mostrando lo terrible de las cosas y terrible, casi nunca es bello…

 Pero eso sí; es necesario que exista un coeficiente intelectual alto,  capaz de suministrar al texto,  cierta belleza en cuanto a la forma de un decir,  de un nombrar, o de  un mostrar.

 Todo escrito requiere de una cierta armonía contextual, de una lógica que debería ir más allá,  de un simple sentido común.

 Lo estético por si solo  des- merita, por cuanto no lleva, no abarca dentro suyo lo ético como lo más.

 Ejemplo: Dices rosa: Una rosa engalana tu frente primorosa…. Etcétera, etcétera, debe ir más allá de la rosa, por ejemplo ¿Qué se encuentra dentro de la rosa que la hace parecer tan bella? Lo estético busca  no lo esencial, sino lo aparente, la mera apariencia insustancial de algo. 

 La ética  a veces, debe apretar los pies de quien se enfrenta a la lectura,  para que este fije sus ojos en lo que es…

 Lo que es, casi siempre es lo que no se ve de buenas a primeras.
Lo externo, la apariencia, lo que niega en si la verdad de lo que es, es lo insustancial. Lo banal. 
La estética, sin la ética esta carente por decirlo de algún modo,  de la verdadera belleza en si… Lo bello no necesariamente tiene que ver con la mera forma… 
Lo profundo, lo abismal es a lo que se teme…

Es a lo que cierto tipo de escritor, o de lector no quiere enfrentar. …

BEATRIZ  ELENA MORALES ESTRADA.  

 

 

miércoles, 14 de abril de 2021

Dialogos con la sombra



Beatriz Elena Morales Estrada© Copyright

 

Diálogos con la sombra

 

Alcides, entrando a los jardines del palacio terrenal.

Poniacenia  desde lejos pregunta.

¿Vienes  o vas? 

¿Eres portador de buenas noticias?

 ¿O qué  traes en tus manos que veo plumas como aves?

Alcides

Solo sé que he venido desde el otro lado de la luna,  donde el tiempo se hace incólume o se eterniza en la punta de los  dedos.

 

Poniacenia

¡Oh por Dios!    Veo que solo eres u n soñador de mundos.

 

Alcides

Es el parir… 

Son como  constelaciones de fuego o un mar de tristeza, que pareciera ser,  desconcierta.

 

Poniacenia

  Y una laguna húmeda y humectada   germen de vida;  serpentea dentro,  voraz como boca sedienta  y es cuando el abecedario y los túneles de mí ser, son penetrados por el aire, dando  comienzo a la vida. 

 

 Alcides

 ¡Oh desdicha de las desdichas!

 ¿Qué tiempos son estos que nos ha tocado vivir?  

 

Poniacenia

Vivimos   un eterno  tiempo; sin talamos, sin sol, sin luna y sin estrellas.

En una incertidumbre,  que cada día pareciera ser,  se vuelve congoja.

 

Alcides  

Es cierto pareciera ser que declina el labio,   como declina la tarde. 

 

 Poniacenia

Tal parece  que cae la boca como cae la noche.

Si. Cae el telón y a veces entramos como en un marasmo; como en incógnitas encrucijadas,   que nos detienen  sin detenernos.

 

Alcides

Un rio, un rio corre en nuestra cotidianidad   y no lo vemos, pero si lo  sentimos.

Poniacenia

La noche que  estamos viviendo me trae   del pelo y el pelo me trae   de entre la noche.

Alcides

Y hasta   parece  que hay  un desfile de funestas miradas… Sí.  

 

Poniacenia

Nuestro tiempo es como el lomo de un caballo

 por fuerzas endógenas y exógenas agitado.

 De movimientos trémulos y hasta  pendencieros.


Alcides

 Labrado quizá,  en el taller del mejor  o peor orfebre.  

 También como  madera  fina y delicada.

 

Poniacenia

Del mejor orfebre,  Alcides, dado que es templanza para el espíritu.


Alcides

 

Nuestro   tiempo es como un viento  fuerte

que va esparciendo llamas incendiarias.

Poniacenia

 Es como una vía láctea a punto de dispersarse,  expandiéndose, y  a punto de desintegrarse.


Alcides

 Cómo un  planeta,   cuyo aire se está cociendo a fuego medio

 por   dentro,  por fuera,   en el espacio, apurado por fuerzas móviles.


Poniacenia

Sí, cuyo vacío es inexorable,  en frente a un planeta gigante.

Es el mismo vacío que genera en nuestros huesos ansiedad y dudas. 

Alcides 

También yo he sentido el filo puntiagudo de un puñal, 

  la daga de una cruenta realidad atravesarme la garganta.

Poniacenia

Yo por mi parte, he sentido que  en un candor de almas,  se regocija el cielo…

Alcides

Se regocija el cielo,  pero hay temor en nuestro  mundo.

Yo por mi parte he visto  soles y lunas desplomarse entre mis manos, vestigios de submundos  interiores que parecieran ser,   se deslizan  de entre los dedos.

Poniacenia

¿Qué mundos extraños y desconocidos son esos,  de los que hablas y de  una belleza tan aterradora como sublime?

¿Tal Vez   son parte de un organismo vivo?

Alcides

 Quizá… No lo  sé.

Frágil armadura, que por ser tan frágil,  lleva en si la   ternura,

     arropan   no obstante en sí, al ser. 

Fundan   en su fragilidad el mundo,  toda creación y toda cosa.

 

Poniacenia

Y en parajes arcaicos,   donde subyaces  como en un ensueño,

esperas  que una mano pródiga,  pinte tu cuerpo desnudo

 y lo bañe con flores de azahares.

 

Alcides

¡Oh!  Y tu  alma en vuelo  padece y  anhelas que sean  purificados  tus recintos,  para que puedas brotar como flor de loto.

Poniacenia

 

Las flores  vivas se marchitan,  mientras  mis pensamientos están en el aire,  desgastada ante el intento suicida  de mi memoria.

 

Alcides

Delirante y con los ojos desorbitados cual loco en frenesí,

también como con asombro; así mirando, casi  con las órbitas salidas,  mirando,  siempre mirando,  absorto , casi con frenesí.  Te veo.

Veo tu mano aferrada a la chambrana, con fuerza,  con vigor,  segura de ti misma; sin temor al vértigo, sin temor a la caída,  sin envidia de nada, sin temor  del vacío.

 

Poniacenia

Si. Es  porque allí veo  el estanque azul, el

lago secreto.

El estanque de los peces dorados.

La levedad de las plumas.

 

Alcides

El vino de tu boca, 

cabellos como terciopelo

tu rosa trae espinas,  rompiendo la noche  me hace desvariar.

 

 Poniacenia

 

Deshojando margaritas,  

como flor de los mares

aquietada  unas veces,

  sosegada  otras,

 intempestiva, o  melancólica,

apartada en la sagrada morada de los dioses. 

 

Alcides

Siempre persiguiendo mariposas,

siempre  en la cumbre de la noche.

 

Poniacenia

 

Noctámbula, casi perdida

en la soledad infinita,  en el aislamiento total.

Sola en un cuarto, sola y allí  fue,  en donde descubrí que realmente

las cosas son terribles en  la vida.  

Noctambula, sí.

 

Alcides

En cambio yo  podría dar a mi alma  el vuelo que quiere; ni la muerte, ni nada,  me hará desistir,  tengo alas muy blancas, que  ni la guerra,  ni la peste, ni la humillación, ni el desdén me harán desistir.

 

Poniacenia

 

A veces; hay ciertas cosas que  no valen  la pena. 

 Los hombres mueren, las naciones viven, los poderosos  se atrincheran. Se ocultan. 

Las naciones se van unas contra otras, los pueblos mueren.

  No mueras tú.

No pierdas  el origen de ti  mismo.

 

  Alcides

No me perderá el agujero de tu boca,

 no me tragara  el  abismo de tus ojos.

 

 Poniacenia

 

  Ni la sombra solar,  que de tu presencia surge, 

no opacaran mis ojos,  tu supuesta  luz.  

Esa que irradias, no apagaras mi sonrisa

Ahora no. No   durante la Pandemia.

 

Alcides

 La pandemia  no nos opacara

Ni quitará el brillo de los ojos.

 No abra bruma en ellos.

 

Poniacenia

¡Date prisa!    ¡Ven!

A coro:  Poniacenia  y Alcides

 

  ¡No mueras tú!

  ¡Date prisa  Ven! 

 

Beatriz Elena Morales Estrada© Copyright