lunes, 26 de agosto de 2019

Moneditas para los que les gusta la filosofía. Y HABLANDO DE FILOSOFÍA





Moneditas para los que les gusta la  filosofía. 
                                       Y HABLANDO DE FILOSOFÍA
Ese detener el fluir de tiempo,  es una cosa; en la  que persiste  el pensamiento enviándolo    hacia la filosofía , pues la filosofía encierra dentro suyo  el pasado, el presente,  como el futuro mismo,  ya que reúne en sí, el éxtasis  de lo que es  y lo  que es, es el ser creándose a sí mismo. La filosofía es también aquello que es manifiesto,  pero que parte de aquello,  que no se manifiesta; es decir del ser mismo,  porque tiene que negarse a sí mismo para poder manifestarse o afirmarse como lo que es. Al afirmarse como lo que es; la filosofía está  demostrando también su cárater de coherencia; en cuanto esta  también obedece a un orden y ese orden también posee carácter   de organización; esto quiere decir que es poseedora de un cierto dinamismo y por supuesto que  tiene una cantidad de implicaciones, que no vamos a tocar aquí. Sin embargo,  diremos que el verdadero filósofo,  no solo es el que crea; sino  el que va más allá,  de sus antecesores  o que los lleva incluso  más lejos, de  lo que podríamos decir de un tiempo determinado y para un determinado tiempo; pero a su ves ese tiempo determinado tiene un límite. Y cuando esto sucede es precisamente cuando la filosofía tiene que retornar hacia su centro para  negarse a sí misma como tal y volver a empezar…Pero al volver a comenzar y así es ese empezar de nuevo, se da es esa afirmación es en el  devenir del tiempo mismo que la lleva a replantearse… Llegados a este punto,  nos damos cuenta que esto es algo,  que tiene que ver es,  con la realidad, con la vida  misma, precisamente allí; en donde habitan los hombres, las mueres; la humanidad, la sociedad  en la nos desarrollamos y que por supuesto tiene ciertos   derechos y deberes  y uno de ellos tan cotidianamente pasado por el papallo, para decirlo  de una manera prosaica, es el respeto por el otro,  por los otros, por los demás. Existen ciertas éticas   y también una cierta moral que debe  ser mirada es en torno a ese respeto por los demás; es recordar,  que en lo cotidiano compartimos en comunidad con los  otros; aunque no compartamos las mismas cosas   etcétera… Claro la filosofía,  entra a hacer referencia a los objetos y las cosas y   por supuesto,  examina  los objetos externos y  los integra a sí misma, enriqueciéndolos y transformándolos a su vez.; la filosofía presenta también un carácter inacabado; en cuanto ella es esencia pura, consciencia pura, conocimiento puro, en cuanto ella se vuelve hacia su centro; hacia sí misma.
.Empero los sistemas filosóficos, las sociedades y sus costumbres caducan de tiempo en tiempo; pero la filosofía,  por ser precisamente aquello que persigue al conocimiento de las cosas y sus fundamentos, es en sí misma aquello que es “increado”    en cuanto tiene que ver es con la creación misma y la cuestión es  que se da la potencialización   de esta, en el pensar  del ser, que se manifiesta también atraves;  por medio del  logos.  Del Logos del pensar en el ser.
Lo que habla atraves del logos,  es precisamente el pensar del ser, el ser mismo y que se manifiesta por medio del lenguaje.  Cuya  esencia es el lenguaje mismo.
                      Beatriz  Elena Morales Estrada©Copyright.
Beatriz Elena Morales Estrada© Copyright       



martes, 15 de enero de 2019

VAMOS HAY QUE SUPERAR A LA BESTIA







                                         VAMOS HAY QUE SUPERAR A LA BESTIA

Vamos, supera a la bestia que eres.
Doblégala bajo tus pies y entonces, entonces quizá comprendas, que es la verdadera humanidad; y cuál su verdadero sentido.
También sabrás, que superarla no es fácil; no, para nada, porque todo es una lucha, en donde nada es incontinuo.
En el laberinto de medusa, en los secretos túneles que te llevan a deambular de un lado a otro , se arrastra, entre efluvios de candentes lavas, rabiosa;
ve a buscarla como la heroína o el héroe que eres ; cázala, y sométela a tu voluntad.
Pero entiende que tú voluntad, no es la tuya, alguien más, está sobre de ti, no para dominarte; sino para levantarte del suelo, en el cual te encuentras tirado…
Lo que hace, que la humanidad, sea realmente humanidad; es decir, lo que nos humaniza esta es, en mi mismo ser, nuestro ser, el ser y es el , quien a su vez , deberá convocarnos, reunirnos, en torno a algo, que sea flama y se haga hoguera, sin quemarnos, para que estemos ahí , a la búsqueda de un ser nuevo, en torno a una atmósfera cálida, de algo, que nos una y quizá, el amor , la solidaridad y la lucha por la paz y la justicia; se aproximen a nosotros , se desprendan de nosotros y podamos al fin, comprender de que se trata todo esto ; humanidad , la humanidad entera comprenda en verdad, las palabras y se dé a la búsqueda de una paz ; se trata de una paz, que traiga consigo, justicia para todos y no para unos cuantos ; se trata de aplicar la palabra solidaridad y de darnos los unos a los otros para entender cuál es la verdadera solidaridad; la del alma y la de la fe, que en suma son una misma.
La de la fe en la humanidad; en nosotros mismos; pero también en el ser…
Y cuando se trata de la de fe, hacia algo, que se considera superior ; decimos entonces , que la fe; no solo es creer sin ver, es ver y comprender, reconocemos también que se trata es del conocimiento de la verdad ; la de la fe como una manera de conocer y de ver la realidad del acontecer; y ella es algo, que se desprende del alma misma, para lo cual, se trata, de una realidad que se capta, solo por ese medio, sin perder de vista lo que le mundo de los sentidos nos presenta como real ….
Ejemplo; en el mundo de los sentidos tiene peso, lo que ves y palpas; no lo otro; lo que no tocas ; pero que se sabe que está ahí; no porque no lo veas, no quiere decir, que no es real; ahora bien, es fácil quedar atrapado no solo en el mundo de los sentidos ; sino también en el mundo de las formas, que entre otras cosas son maneras predeterminadas, de sujetarnos a conceptos o ideas ; que nos alejan de lo real verdadero y de lo cual se desprenden, todas las otras cosas; o mejor esas irrealidades o realidades, o como tú, apreciado lector las quiera llamar…
El caso es que, hemos sido llamados a pensar y a
re-pensar sobre los uno y lo otro.
Dos caminos, nos llevan a conocer la realidad única; pero tarde que temprano, si te lo propones podrás ver ambos lados de ese camino…
y resulta que, a veces sin proponérselo , alguien te hará ver lo que aún no ves.
Y quien tiene fe, ya no duda, porque sabe y conoce.
La fe; no solo es creer sin ver, es también conocimiento de la verdad
Y quien tiene fe, ya no duda, porque sabe y conoce.…
Nadie es tan diferente, que no se parezca a los demás. Ni tan parecido que sea igual a los otros;
Pero como humanidad, tenemos mucho en común.

Beatriz Elena Morales Estrada© Copyright

INSPIRACIÓN EL VIAJE Y LA OBRA






                                                          
                                                         INSPIRACIÓN

                                                   EL VIAJE   Y   LA OBRA

Ella regresó del viaje,  por la  nocturna cuesta del sendero marcado.  Ascendió por la colina y diviso  los valles y  las planicies y a lo lejos,  las ciudades  resplandecientes…
No obstante observó,    que los primeros rayos del  amanecer,  se acercaban;  contrastando  así y  de algún modo,  el verdor de esa tierra,  con el azul,  entrelazado en  tonalidades  rojizo y naranja  de esas horas.
Ella, que siempre se había arropado  con la noche y  vestido con lluvias que  humedecían su lecho; por cierto estaba cubierto de hojas blancas, verdes y rojas, se quedó yaciente por el cansancio y así, la encontró  el sol destructor del medio día, que atravesó sus párpados, dando escandalosamente en su rostro y partiendo sus labios, que quedaron resecos por la exposición a tan bravo fuego y de su garganta reseca,  surgió un grito de sangre y de muerte  ¿O quizá ese grito significaba otra cosa?  Pero aun,  no era posible que eso,  significara vida,  a pesar de eso, de todo; todo era oscuro, muerte,  casi eterna; ya que ella, no se libraba aun,  y en  esa dura batalla  contra la sombra, sombra que  abría  sus fauces para tragársela, Estefanía, supo, que en cualquier monto sobrevendría la dicha; pero hasta este momento, hasta ese entonces, continuaría  oculta en  la  rocosa pared, entrelazada por así decirlo, con la parturienta oscura y ya no habría lugar,  para que una cosa se confundiera con la  otra; ahora ya sabía,  que las dos,  no tendían,  hacía  un mismo fin,  un mismo objetivo; pero ella debía  de ser objetiva,  en ese momento y resguardarse  contra  la innombrable, para así poder perpetuar la vida, la que deseaba,   ya que es  fuente  magnánima ; algo se  lo gritaba  adentro, y de esa magna y sideral quería beber, hasta embriagarse, pero de felicidad, de  alegría, hizo un esfuerzo sobre humano  y se inclinó, quedando sentada y luego se hecho hacia un costado , rodando,  buscando la parte cobijada  por los árboles , allí esperaría  su llegada, pero ya no tenía las manos vacías, estaba buscando, tenía un ideal, como punto de apoyo, entre un sueño volátil y casi etéreo  pero sabía que si lograba fundir espíritu y materia, tal y como se aferra el hueso a la carne, y además intentando, dar la pincelada final, esa que diera un matiz  único, dorado, un  color buscado y no buscado , para así terminar ese cuadro,  esa pintura más significativa, ese ideal, más no idealizado , porque no era una fantasía, era la realidad ; esa,  que es imperceptible,  al mundo de los sentidos , la que profanos no reconocerían  como tal, porque se hallan constreñidos a lo que está delante de su ojos…
Sí, ella regresó del viaje y tan solo,  para retomar de nuevo el camino, estaba  ya,  en el punto de encuentro  máximo   y comprendió,  que siempre habrá un comenzar de nuevo, un renovarse, un levantarse  de una muerte,  tras otra muerte  y solo se termina para mirar  otra vez  y desde un ángulo diferente . Boca abajo, oculta; así  la encontraría   de nuevo la parturienta   oscura y entonces, se levantó y grito Eureka; si, la lucha es ardua, hay que seguir andando, no me puedo detener  ¿En dónde estará el tesoro qué el viejo pirata  robo en alta mar y luego escondió? Lo buscaré se dijo ¿Pero hasta cuando, hasta cuándo?    
 Hasta encontrar un punto de apoyo, un punto de apoyo,  entre el tesoro y yo y  y0oooo
Sí,  ese será el punto, que hará, que la pincelada mágica  encuentre ese contraste,  entre la sombra y la luz, entre la noche y el día, entre mi conciencia y yo  ¿y yo?
Y cuando llegó la innombrable ,  con sus fauces de loba,  y sus hienas  fulgurantes  de emanaciones podridas  y   de  fétida saliva;   dispuesta a tragare,   hasta el último  fragmento de la sustancia que emanaba de ella, esta,  estaba  de pie en lo alto, recreándose con  su obra y  justo,  justo en ese momento,  ya había  trazado  la pincelada  mágica.. .
 Y ante el grito de Estefanía,  de ¡Eureka!  No le quedó  más remedio,  que retroceder  disminuida,  por el ese grito, que la  conturbó y la llenó de rabia, pero nada podía  hacer ya…
Beatriz Elena Morales Estrada© Copyright

EL MAESTRO secuencia 1 y EL MAESTRO Secuencia 2





                                                      EL MAESTRO secuencia 1

Y un día,  un sabio se paseaba, en compañía de sus discípulos,  por los alrededores de una universidad  barrial y elocuente;   de repente, una nube tórnanse grisácea, a lo lejos, la ciudad  se divisaba ¡Maestro! ¡Maestro!  Dijo el impetuoso y más cercano  de entre los discípulos; mire, aquellas otras nubes se han vuelto también oscuras; es cierto dijo el maestro, siempre mirando con dulzura a su discípulo, le pregunta ¿Tú qué opinas Maico de  esas nubes,  que se propagan en el mismo color o sentido? Maestro, que pronto caerá la lluvia y fertilizara a la  tierra o  la destruirá según  la situación.
 Los otros discípulos escuchaban atentamente y entonces el maestro, mirándolo con infinita ternura le dijo; tienes razón hijo mío y deberemos aprender también, que así como las nubes pueden influenciar a otras; aunque estas se derivan de una totalidad  fenoménica o ambiental, relacionada con la temperatura de un lugar específico o de un sentido climático tal; nosotros llevamos  adentro  algo que padecemos  y que en su mayoría  lo transmitimos a los demás, bien sea consciente o inconscientemente y por eso,  es menester , que lo que trasmitamos a los demás y según sea la ocasión,   sea algo, que en lugar de contaminar a los demás, de ensuciar sus  vidas, sea algo que les deje  una enseñanza o simplemente,  los motive a seguir viendo la vida, desde una manera o modo  más positivo, de un modo  más sano.
Otro de los alumnos respondió; fresco maestro que todo va bien. Este lo miro  y le sonrió con el infinito en sus labios y en sus ojos; mientras otro de ellos dijo y si no  nos apresuramos parce maestro, nos va a caer tremendo vendaval. El maestro, aceptó con un movimiento de cabeza, pero antes de ponerse en camino dijo:
 Y recuerda, recuerda Maico y ustedes mis amados  discípulos,  que la fortaleza,  de la fuerza no es la fuerza, no,  es el amor, solo este último da  a la fuerza, resistencia  para seguir caminando, para seguir   transmitiendo lo que es.

Viejo parce maestro;  creo que eso del amor,  está mandado a recoger,  porque no podemos amar a todo el mundo; porque pasa, que en nuestros corazones esta la doble faz; es decir que tanto el día como la noche nos habitan  y con una voz melancólica,  el maestro dice;  tienes razón de nuevo Maico

 Y así, de ese modo,  ellos siguieron su camino, hasta encontrar una fonda, que los albergara del frío y de la lluvia que arreciaban. Solo el maestro susurraba; no del todo Maico; no…




                                                 EL MAESTRO  Secuencia 2

Y cuando estaban en la fonda o sea en la tienda, tomando tinto y al  fragor de las voces, que se hallaban reunidas en el lugar; uno de los discípulos le preguntó ¿Maestro parce es el destino un devenir o es el devenir un destino?
 El maestro parpadeó; lejos de lo que muchos pudieran pensar, no siempre tenía todas  las respuestas; a veces estas,  sólo surgían,  después de un proceso de  masticar y masticar  y masticar…
  Si parce maestro; sabemos que Heráclito, o al menos eso,  es lo que hemos oído decir; que este comparaba al devenir con la flema de una llama, que al observarla fijamente,  suele moverse de un  lado hacia otro.
Es decir,  siempre está poniéndose en movimiento; hay una constante en el todo  y solo se detiene,  cuando se apaga  la flema…
Hay también un estado,  al que podremos llamar la inercia; que es algo así,  como un  golpe,  que te lleva en cámara lenta,  hacia un lugar x o y dentro del mismo movimiento, es  también como que tú,  permanecieras en el tiempo, de tu espacio,  subyugado por un alelamiento tal,  que parece detenerte, pero realmente no es así… 
Y necesitas que alguien,   te saque de allí,  por lo general,  es el mismo andar,  quien te jalona, respondió la parce Mariela, que estaba entre sus discípulos.  
Hijos mío,  el fuego es como el alma y este permanece,  en tanto  está permanece,  avivada  por  el juego, que la lleva ahora aquí , ahora allá,  en constante conflagración,   de manera tal,  que el destino es devenir,  en tanto este,  es movimiento y al ser  movimiento, se convierte en destino y ese destino,  es movido por el alma. ¿El alma?  ¿Y el azar y el destino?  Estos suelen juntarse,  en uno solo, en tanto el azar no  existe, no necesariamente, en cuanto,  algo maravilloso,  puede sucederte, la dicha efímera del  instante, por ejemplo; es algo,  que te saca de tu rutina  o de la inercia, en  la  que estabas, que puedes ser efímera,  si y no, eso depende…
Y lo que quiero decir,  con respecto al alma; es que en ese movimiento de lo que,  en esta instancia llamamos devenir  o el movimiento y  de este,  como el destino; es la manera o el modo en que   ella asume  la situación; si tal y  según cómo afronta  el caos de toda esos movimientos. Arguyó  la parce Mariela.
Y así permanecieron en silencio mientras cesaba la tempestad.  Sus almas entraron en un mutismo cargado de melancolía; la lluvia,  el frío arreciaba…

 @BEATRIZ ELENA MORALES ESTRADA