domingo, 13 de junio de 2021

Brevedades: "Ensayo"



Brevedades:

Notas:

 La brutalidad e insensibilidad en nuestras  acciones,  nos hacen perder el plano de lo divino humano.  ¿Por qué?

Según las dimensiones  íntimas de cada uno de nosotros; hay direcciones del alma,  en que esta, pierde su conexión  al cielo; digamos,  que hay, determinados procesos corporales, que hacen  que ella,   pierda su alas.  La conciencia,  al ser  la expresión de ese,  sino  experimental; va estableciendo lo selectivo, de un modo silencioso,   que casi el individuo no lo capta o percibe instantáneamente.

De allí surge,  eso que llamamos singularidad y del cual,  algunos piensan,  que tiene también,  un origen bilógico; al igual que la tolerancia, lo cual  es  muy respetable.

 Según el tipo de experiencias erróneas o no, que vivenciemos  nos vamos alejando o acercando a una realidad reñida,  con el escepticismo  de algunos,  que solo ven,  lo que de plano,  se les presenta ante los ojos y nada más.

  O bien,  ven tan solo lo que les conviene.

Esa realidad,  que es la  que nos conecta con la divinidad y que es precisamente la condición que nos va adecuando a descubrir nuestra verdadera esencia,  llevándonos a ese nivel superior; que es,  lo que nos separa,  de la conducta bestial  e instintiva de la naturaleza cruel  e  inhumana.

 Y no solo el ser humano capta,  esa realidad por medio de la razón; sino también del corazón que le sirve de a temporizador, por decirlo de alguna manera;  para filtrar  por medio de la conciencia,  aquello que no es  humanamente “correcto” ; me refiero a las conductas monstruosas, insensibles, que tenemos con nuestros congéneres y con los otros seres vivos y como hablamos supuestamente aquí , en este escrito de seres, de personas psíquicamente   “sanas”; creemos  que la elevación  de la conciencia,  nos podría llevar a dar  un salto cualitativo,  y hasta cuantitativo,  en la escala de la evolución espiritual ; es decir para  reconocernos, sabernos,  como hijos  de Dios. Y de saber entender,  que en el contexto del padre creador;  el padre no es un mito; sino una realidad,  que nos  hace semejantes  al ser, de los seres.

Pero es una semejanza, que nos tenemos que ganar  y ganar,  con nuestras acciones, que ennoblezcan  nuestra, también, condición  de  seres humanos,  verdaderamente humanos.   ¡Oh por Dios! Valga la redundancia. 

 Sin embargo habría que ahondar más en este asunto.

Beatriz Elena Morales Estrada© Copyright